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#1

Ayudar a nuestros clientes a obtener resultados es la única fórmula que conocemos para que también nos vaya bien a nosotros.

#2

Nunca acudimos a una presentación sin llevar, por lo menos, un 30% más de lo que el cliente espera de nosotros.

#3

Para hacer cosas diferentes hay que pensar diferente. Sólo así podemos superarnos día a día.

#4

No nos avergüenza decir que antes que publicitarios somos vendedores.

#5

Nos gusta trabajar sin perder la perspectiva. Por eso ayudamos a nuestros clientes a fijar los objetivos de cada proyecto.

#6

Sabemos lo que cuesta nuestro trabajo, por eso nunca cobramos más de lo que vale (ni menos).

#7

Entendemos la relación cliente-agencia como algo duradero. Por eso nos esforzamos en enamorar con cada trabajo que realizamos.

#8

Tenemos comprobado que trabajando con una sonrisa, los resultados siempre son más satisfactorios para ambas partes.

#9

Vendemos de todo menos humo. Si nos comprometemos con algo, estamos obligados a cumplirlo.

#10

Nos encanta la creatividad, pero sólo si está justificada para conseguir los objetivos de cada campaña.